
Reproducción de las esponjas
Las esponjas tienen una gran capacidad para reproducirse asexualmente. Al pasar una esponja por una malla de seda, las células separadas se agrupan nuevamente, dejando en el exterior los pinacocitos para formar la capa externa, siendo posible de esta forma regenerar varias esponjas. Para esta regeneración es necesario la presencia de un número mínimo de células y la presencia de determinadas moléculas en el exterior de la célula.

Gémula vista en el microscopio electronico de barrido.
Se obseva la envoltura externa y la masa celular interior.
La reproducción sexual en las esponjas presenta varias peculiaridades. Existen algunas especies dioicas, pero la mayoría son hermafroditas, aunque la liberación de óvulos y espermatozoides no ocurre a la vez. Los espermatozoides se originan a partir de coanocitos desdiferenciados que han perdido su collar de microvilli y flagelo y que posteriormente se enquistan; este quiste también puede englobar un solo coanocito desdiferenciado que posteriormente se divide. Los óvulos se forman a partir de arqueocitos o coanocitos desdiferenciados; suelen fagocitar células adyacentes para aumentar sus reservas nutritivas y por lo general se rodean de otras células acompañantes a modo de folículo.
Espermatogénesis en las esponjas.
En la fotografía se aprecia una cámara de coanocitos
en la que sus células están perdiendo los flagelos y ya se ha enquistado.
Ovogénesis en esponjas.
Aspecto de un "folículo", mostrando
numerosos óvulos rodeados de células.
Una vez producidos los espermatozoides, estos se liberan al exterior por medio de la corriente exhalante y en muchas especies la liberación foma una nube que surge del ósculo. Los óvulos no se liberan, sino que permanecen en el lugar donde se formaron. Los espermatozoides liberados entran por el canal inhalante de otra esponja y al llegar a una cámara de coanocitos o un canal flagelado son capturados y fagocitados como si fueran alimento, pero no son digeridos, sino que forman un quiste dentro del coanocito. Ambas células pierden los flagelos y el coanocito transporta el espermatozoide en su interior hacia el óvulo, donde una vez alcanzado, se fusiona con él o le transfiere el espermatozoide. Así, la fecundación ocurre dentro de la esponja, siendo una fecundación interna, algo raro en animales inferiores; de las 7000 especies de esponjas sólo se conoce una que tenga fecundación externa.
Fecundación en las esponjas.
En la fotografía se aprecia en negro un espermatozoide
fagocitado por un coanocito, ambas células sin flagelos.
Fecundación en las esponjas.
En la fotografía, tomada tras la fusión del coanocito y el óvulo, se aprecia el último con su núcleo en color claro y el del coanocito en un abultamiento externo. El espermatozoide se encuentra entre ambos núcleos.
El desarrollo del espermatozoide, del óvulo y la fecundación posterior, tienen lugar en diferentes partes de la esponja, dependiendo, claro está, del tipo morfológico al que pertenezca. Por ejemplo, en Sycon, la fecundación ocurre en los canales radiales bajo la capa de coanocitos.
El desarrollo embrionario ocurre en el interior de la esponja, siendo pocas las especies que liberen sus óvulos recien fecundados. La segmentación es radial y completa, originando una mórula con todas lás células semejantes.
La larva que se origina tras la fecundación permanece en el estado de blástula y es conocida como parenquímula; esta larva tiene forma ovoide y sus células externas son todas flageladas, excepto las de la zona posterior. Es en esta forma cuando la larva sale de la esponja por los canales exhalantes. Algunas esponjas forman otra larva posteriormente, llamada anfiblástula ; las células mayores, los macrómeros, no son flagelados, al contrario de lo que ocurre con los micrómeros. La gastrulación de la larva se produce cuando ésta se encuentra ya fijada al sustrato y consiste en el desplazamiento al interior de las células externas flageladas, que pierden el flagelo y lo forman de nuevo al alcanzar su posición interna, convirtiéndose en coanocitos; las células internas migran al exterior para formar pinacocitos. Las especies leuconoides tienen una larva llamada ragon de la que se origina directamente la esponja y semeja un sicon con las paredes bastante engrosadas.
Larva parenquímula arriba y Larva anfiblástula abajo
La vida de las esponjas es muy variada según las especies; las hay que son anuales, como las de agua dulce, que mueren al liberar las gémulas, mientras que otras son capaces de vivir varios años. La tasa de crecimiento también varía, pero por lo general es bastante lento y son necesarios varios años hasta que una esponja alcance una talla considerable.

Juan Luis Menéndez
Me gusta la divulgación de la naturaleza y el patrimonio cultural, motivos por los que he decidido comenzar el desarrollo de asturnatura.com. Soy un amante de la botánica y la geología.
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Índice:
- Características generales
- Reproducción de las esponjas
- Ecología de las esponjas
- Clasificación de las esponjas
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Citar como
Menéndez Valderrey, Juan Luis. "Reproducción de las esponjas". asturnatura.com [en línea] Num. 30, 04/07/2005 [consultado el 18/4/2025]. Disponible en https://www.asturnatura.com.
ISSN 1887-5068