Monasterio de Santa María de La Rábida

Monasterio de Santa María de La Rábida

Historia

Según se recoge en un códice de 1714, y dentro de la tradición y leyenda que envuelve el origen del Monasterio de La Rábida, se dice que se remonta a época fenicia, momento en que levantaron un templo al dios protector de Tiro. Los fenicios denominaban a su primera diosa femenina como Rabbad, de donde hacen derivar la palabra Rábida. Bajo el imperio de Trajano, cuenta el cronista que existía un templo consagrado a Proserpina, protectora de la rabia. Al parecer hubo una enfermedad de rabia, acudiendo la diosa. De rabia, rábida hace derivar el nombre del monasterio. En el año 159 hace iniciar el momento cristiano, con la presencia del sacerdote hispalense Ciriaco, quien consagró el templo a María.

La presencia árabe se refleja en la construcción de un morabito o fortaleza denominado Rábhita. De este vocablo parece proceder el nombre del convento. Con posterioridad el cenobio estuvo bajo la orden militar de los Templarios, llegando incluso a darlo como fundación del propio padre San Francisco, en el año 1212, cuando visitó España. De estos hechos que se recogen en el citado códice de 1714, sólo la presencia árabe parece ser cierta. El resto queda en la mera hipótesis, en la leyenda, mientras no haya argumentos que lo demuestren.

En el actual solar de La Rábida debió existir un ribat, convento fortificado musulmán, en el que una comunidad de monjes solados vigilaban los puntos estratégicos de la costa. Dos bulas, la "Etsi cunctorum", de Benedicto XIII, fechada en 7 de diciembre de 1412 y la "Licet is", de 17 de febrero de 1437, junto al estudio del propio edificio, permiten fechar la construcción del convento en el primer cuarto del siglo XV. En la primera bula se indica que la iglesia y la casa ya existían, lo que nos permite afirmar que la edificación se iniciaría a principios del siglo XV y se concluiría en el transcurso del mismo. El eremitorio de La Rábida fue fundado por fray Juan de la Rábida hacia 1403. Desde 1437, el monasterio queda integrado en el derecho común de la observancia. Ya a finales del siglo XV, se produce la visita de Cristóbal Colón a la Rábida, acompañado de su hijo Diego.

El cenobio franciscano se constituye en el centro donde Colón tiene puesta sus miras para conseguir que España apoyara sus proyectos. Estas dieron sus frutos en 1492, con la partida de las naos desde el puerto de Palos de la Frontera. En 1623 se constituye como casa de recolección, restablecido por fray Bartolomé de San Francisco. De este modo siguió durante los dos siglos siguientes, en los que se incrementó el número de frailes, se renueva el edificio y se amplía su acción apostólica y cultural. Según el P. Germán Rubio, en el siglo XVII se hicieron grandes reformas especialmente por el padre fray Blas de Benjumea, Ministro Provincial entre 1663-1666. El terremoto de 1755 afectó principalmente a la iglesia, abovedándose su cuerpo y levantándose una cúpula con linterna sobre el crucero. También se vio afectado el claustro de la portería, el cual se rehizo de nuevo, aprovechándose los cimientos antiguos.

El siglo XIX supone el ocaso del monasterio de Santa María de La Rábida. Todo se inicia con la invasión francesa, el saqueo y el cierre temporal del convento. Aunque permanecieron dos religiosos en el cenobio, el desastre fue general. Posteriormente, entre 1820 y 1823, con la exclaustración temporal, se clausuró el monasterio. A pesar de que la orden vuelve en 1823, entre 1835 y 1836, en virtud de la Real Orden del Ministerio de Gracia y Justicia, se produce la exclaustración definitiva con la supresión de los monasterios y conventos con número inferior a doce religiosos. El Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, obtuvo un Real Decreto de 1930, por el que se creaba un Patronato especial para el cuidado del monasterio. En él se funda la Universidad Hispanoamericana Santa María de La Rábida, con el primer curso de verano inaugurado el 1 de septiembre de 1943.

Descripción

El Monasterio de la Rábida se asienta al sur del término Municipal de Palos de la Frontera, en la que se puede considerar la última colina antes de la desembocadura del río Tinto, cuyo paraje domina, junto con el estero de Domingo Rubio, el canal del Padre Santo y la barra de Saltés, por donde Huelva se abre camino hacia el mar, lugares, todos ellos citados por Cristóbal Colón en su diario de viaje.

El Monasterio ofrece, en sus fachadas, una gran sencillez e incluso, humildad propiamente franciscana. La fachada sur, donde se ubica la portada de la iglesia, está labrada en sillares, presentando una ventana bastante reformada, con labores mudéjares. Formando ángulo recto con la iglesia existe un módulo de planta rectangular, clausura del convento, en cuyo testero se abren varias ventanas de distinta fisonomía.La sobriedad se hace aún más patente en el lado norte, donde el blanco de sus muros predomina sobre las diferentes ventanas y puertas, que se abren.

La fachada norte no presenta elemento que difiera de la sencillez ya mencionada, tan solo una portada de sencilla traza entre dos contrafuertes. Según una crónica de 1714, el aspecto exterior del monasterio ofrecía un carácter de castillo-fortaleza, con almenas y azotea. Actualmente al exterior se acusa el tambor octogonal y la linterna del siglo XVIII y la espadaña, y como cubierta tejas árabes a dos y cuatro aguas.

La portada de acceso a la iglesia es de estilo gótico con arco apuntado, aunque presenta detalles mudéjares, sobre todo en la parte inferior, donde aparece labrada en ladrillo agramilado. Muy interesante es el tejaroz sostenido por diez canes con cabezas de león, y los arquillos de traza ojival que se encuentran intercalados.

Se ingresa al recinto conventual a través de dos portadas, localizadas en el lado este. La del zaguán, es un arco de ladrillo de medio punto peraltado, cuyos extremos apean sobre impostas terminadas en dos columnas octogonales, que descansan en altas basas. La puerta de acceso al vestíbulo interior es de arco conopial rebajado, de sillería, con restos de pintura mural. Entre el claustro de la portería y el mudéjar, se levanta la espadaña, la cual presenta dos cuerpos en altura. El primero con vano de medio punto; el segundo con vano de medio punto que remata en frontón triangular.

El cenobio presenta una planta irregular propia de su estructura medieval, conservando la fisonomía de su traza primitiva. Quizás en su concepción se pudieron aprovechar determinadas edificaciones preexistentes. El conjunto se articula en torno a tres núcleos principales: la iglesia-santuario, el claustro de la portería y el de la clausura. La iglesia de pequeñas dimensiones posee una sola nave rectangular, con presbiterio de la misma traza, en cuyo lado del evangelio, se localiza la sacristía, la cuál presenta planta rectangular. En el lado del evangelio se abren dos capillas de planta rectangular, mientras que a los pies de la epístola se localiza la Capilla de Nuestra Señora de La Rábida o de los Milagros, de planta cuadrada. Tras la Capilla de la Virgen de la Rábida, se localizan dos grandes estancias rectangulares que constituyen parte de la actual clausura.

A través de un zaguán de planta rectangular, se accede a un vestíbulo interior de la misma planta, donde a su izquierda se ubica la sala "Vázquez Díaz", que ofrece la misma planta, y el antiguo cementerio. A la derecha, se localizan distintas dependencias que pertenecen a la clausura, todas ellas de planta rectangular. A través del vestíbulo citado se ingresa en el claustro de la portería o de la hospedería, de planta casi cuadrada, se articula a base de cuatro galerías sobre pilares de ladrillo. En el mismo se localiza la biblioteca, la cuál presenta planta rectangular muy alargada. Mediante un pequeño vestíbulo ubicado en el ángulo suroeste, se accede al claustro mudéjar, el cual posee dos plantas en altura, con planta rectangular. Entre las dependencias a destacar en este claustro se puede señalar, la sala de conferencias abierta en el lado sur, presentando planta rectangular, con portada y arco de medio punto, y el antiguo refectorio, con planta rectangular, en el ala norte. Junto a éste último y alrededor del patio, se ubican las celdas, las cuáles presentan plantas rectangulares y cuadradas.

En el piso superior, sobre el zaguán y la sala "Vázquez Díaz", se localizan la "sala de banderas hispánicas" y la sala donde está la maqueta del hidroavión "Plus Ultra". Respecto a las otras dependencias no citadas aquí, es decir, las restantes del piso alto y otras del piso bajo, hay que decir que son de planta rectangular y cuadradas, no pudiéndose aportar más datos al no permitirse su visita.

No existen elementos sustentantes exentos en la iglesia, siendo sus propios muros en fábrica mixta de ladrillo, tapial y mampostería de estructura árabe. El claustro de la portería o de la hospedería, posee como soporte pilares de ladrillo, sobre los que apoyan arcos rebajados. En el segundo piso se abren tres sencillas ventanas en cada uno de sus lados. El claustro mudéjar, por su parte, se articula a base de arcos peraltados, seis con una puerta en los lados norte y sur y cinco en este y oeste, que apean sobre pilares de ladrillo agramilado de sección octogonal, alzándose sobre pretiles o podiums. La galería alta posee pilares como soporte.

El cuerpo de la iglesia presenta como cubierta artesonado de madera policromada, que sustituyó en 1892, a una bóveda barroca. El presbiterio, por su parte, posee bóveda de arista, aunque no es la original. Las galerías del claustro de la portería, se cubren con bóvedas de arista en tramos compartimentados por arcos fajones. Las del claustro mudéjar, por su parte, presentan un sencillo y severo artesonado. Entre las salas del monasterio, cabe reseñar la sala del Padre Marchena, la cual tiene una más que interesante artesa.

Respecto a las demás dependencias del convento, es decir, zaguán y vestíbulo de acceso, sala "Vázquez Díaz", sacristía, sala de Conferencias, refectorio, biblioteca y las celdas de los monjes, ofrecen cubiertas de simple estructura.

Otros elementos interesantes son:
-Puerta que comunica la iglesia con el claustro mudéjar. De interesante factura, se puede observar la repetición del arco lanceolado que se encuentra en la iglesia de Santa María de la Granada de Niebla.
-Puerta de acceso al claustro mudéjar. Situada en el ángulo suroeste del claustro de la portería, ofrece arco apuntado de estilo gótico-mudéjar de ladrillo, con azulejo en la parte superior.
-Portada del antiguo refectorio. De estilo gótico y ladrillo visto, presenta en sus zócalos piezas vidriadas de varios colores.
-Puerta de acceso al interior del convento. Presenta arco conopial rebajado, de sillería, con restos de pintura mural.
Fuente y bibliografía:
Instituto andaluz del patrimonio histórico.

Fotografías de Monasterio de Santa María de La Rábida

Dispones de 18 fotografías de Monasterio de Santa María de La Rábida

Glosario de términos

Almena
Cada uno de los prismas que coronan los muros de las antiguas fortalezas para resguardarse en ellas los defensores.
Arco
Elemento sustentante, que descarga los empujes, desviándolos lateralmente, y que está destinado a franquear un espacio por medio de un trayecto generalmente curvo.
Artesonado
Techumbre, bóvedas o sistema de cubierta, formado por artesones o casetones.
Basa
Pieza inferior de la columna que sirve de apoyo al resto
Capilla
Edificio contiguo a una iglesia o parte integrante de ella, con altar y advocación particular.
Cenobio
Sinonimo de monasterio. Casa o convento, ordinariamente fuera de poblado, donde viven en comunidad los monjes
Claustro
Galeria cubierta alrededor de un patio generalmente cuadrangular y separada de él por columnas o arquerias. Suele estar adyacente a la iglesia y formando parte de un complejo mayor (catedral, monasterio etc.). Su etimologia procede de claustrum = cerrado.
Contrafuerte
Construcción destinada a contrarrestar el excesivo empuje sufrido por una pared.También llamada estribo.
Convento
Del latín conventus (asamblea o congregación) derivado de conveniere (juntarse). Edificio donde habita una conjunto de religiosos.
Crucero
Espacio en que se cruzan la nave central de una iglesia y la que la atraviesa.
Cubierta
En general, sistema de cierre de la parte superior de una construcción.
Imposta
Hilada de piezas sobresaliente sobre la cual se levanta un arco o bóveda, que se coloca también para evitar que el agua discurra de forma continua por la fachada del edificio. También es un saliente con forma prismática a modo de capitel situado sobre una pilastra.
Linterna
Torre pequeña más alta que ancha y con ventanas, que se pone como remate en las cúpulas de algunos edificios y sobre las medias naranjas de las cúpulas de las iglesias con el objeto de iluminar su interior. También por extensión se suele denominar linterna al cimborrio de una iglesia
Monasterio
Conjunto de edificios donde se agrupan los monjes para vivir en comunidad. Voz proveniente del latín monasterium y este a su vez del griego monastérion
Monje
Persona que perteneciendo a una orden religiosa vive en comunidad en un monasterio. La voz proviene del occitano monge, que a su vez procede del latín monicus que a su vez procede del griego monachus.
Nave
Cada uno de los espacios en que se divide longitudinalmente una iglesia.
Pilar
Pilastra exenta, suele tener más consistencia que la columna.
Planta
Plano de la sección horizontal de un edificio.
Portada
Puerta ornamentada o decorada.
Presbiterio
Zona elevada del templo cristiano en torno al altar.
Refectorio
Comedor común en un convento. Voz proveniente del latín refectorium de refectus, refección o alimento.
Ribat
Palabra árabe que quiere decir pabellón de caza o de descanso
Sillar
Bloque de piedra labrado y asentado en hiladas, con forma, dotado de seis caras.
Solado
Suelo o pavimento de los edificios
Tambor
Cilindro o anillo donde se apoya la semiesfera de la cúpula
Tapial
Técnica constructiva consistente en la realización de un encofrado de madera, que era rellenado por piedras y hormigón (mezcla de cal, arena y agua). Esta técnica constructiva consiste en el uso de encofrados de diversa anchura rellenos de todo tipo de materiales mezclados con cal que de por sí no son resistentes, pero que mezclados y sometidos a secado y presión, adquieren gran dureza. Cada encofrado tenía, aproximadamente unos 90 cm. de altura. Las sucesivas superposiciones obtenían la altura deseada.
Tejaroz
Alero del tejado.
Testero
Pared de un edificio que se encuentra frente a la entrada principal. Tambien se le relaciona con el muro de la cabecera de la iglesia.
Vano
Abertura o hueco abierto en un muro que realiza funciones de puerta, ventana, respiradero etc.
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