Hebeloma crustuliniforme (Bull.) Quél. (1 de 3)

Basidiomycete muy común en un amplio rango de hábitats. Es tan versátil, que puede vivir desde los pinares costeros a las praderas subalpinas con Dryas octopetala. El color que predomina en todo el basidioma es el blanco, pero frecuentemente se mezcla con otras tonalidades amarillentas o muy ligeramente pardas. El sombrero es muy viscoso. Las láminas, adnatas, son de color pardo grisáceo y emiten, en tiempo húmedo, pequeñas gotitas límpidas. El pie, de hasta 1 cm de diámetro, es blanco y finamente pruinoso. Carece de cortina visible. El olor de la carne es rafanoide y el sabor amargo. Hebeloma crustuliniforme se considera como especie potencialmente tóxica, como la mayor parte de las especies de este género. Puerto de Ventana (Teverga-Asturias), 19-IX-2008, bajo Betula pubescens.