Tejo de Salas

Tejo de Salas

Se trata de un tejo notables dimensiones, de buen porte, que ha sido declarado Monumento Natural del Tejo de Salas (Decreto 77/95, de 27 de abril ) en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de Asturias (PORNA). Además, el tejo es una especie protegida en Asturias.

Localización: en el concejo de Salas, en el cementerio de la localidad, junto a la Iglesia de San Martín

Dimensiones: altura total: 15.50 m; perímetro: 6 m; diámetro de copa: 13 m.

Especie: Taxus baccata, tejo

El tejo de Salas crece en el interior del recinto del cementerio de la villa, delante de la antigua iglesia parroquial de San Martín, declarada Bien de Interés Cultural, que tiene más de ochocientos años de historia. Es por tanto el tejo centenario, pero se desconoce exactamente la edad, aunque posiblemente date del siglo XI o XII, al igual que la iglesia.

La copa tiene la típica forma cónica y ancha que caracteriza a las coníferas. El tronco es recto, ligeramente inclinado, y presenta las típicas arrugas longitudinales típicas de los tejos viejos. Tiene zonas escamadas y numerosos nudos en el tronco donde el musgo aprovecha para crecer. Las ramas se originan de forma escalonada desde baja altura, son largas, especialmente en la base, y las ramillas son colgantes.

En la zona donde ahora se levanta el tejo se encontraba un antiguo cenobio prerrománico, fundado en el siglo VIII o IX, época de la construcción de la iglesia de San Martín; está decayó y fue reconstruida en el siglo X (siendo la última reconstrucción del XV), mientras que en el siglo XI o XII fue reconstruido el monasterio, época en la que posiblemente fue plantado el tejo. Esta iglesia de San Martín fue hasta 1896 propiedad de los Valdés Salas y una de las dos parroquias del concejo; actualmente está declarada como Monumento histórico artístico. Después de la guerra civil, el cementerio necesitó ser ampliado y el tejo corrió grave peligro de ser talado, pero la oposición vecinal evitó la muerte del árbol, por lo que ahora el tejo se encuentra dentro del cementerio. A la entrada del mismo, junto a la puerta, hay otro tejo también de dimensiones notables.

El tejo es un árbol bastante usado en jardinería y ornamentación, donde existen numerosas variedades, ya que es bastante fácil de recortar. Su madera es de buena calidad, densa y elástica, rojiza al ser cortada y parda rojiza seca. Se usaba de antiguo para la fabricación de arcos y ballestas, y también para la fabricación de herramientas y utensilios de cocina; un barco de la flota de Enrique VIII, el Mary Rose, hundido en 1545 tenía en su interior 167 arcos hechos con madera de tejo. Más antigua es todavía un hacha de 50000 años encontrada en Clacton (Inglaterra) hecha de tejo. En Asturias se fabrican incluso gaitas con esta madera, pero son pocas debido a la escasez de la misma. Es duradera, imputrescible, y algunos sarcófagos de faraones egipcios fueron hechos con ella.

Los tejos, al igual que algunos otros árboles, han sido considerados árboles sagrados por antiguas culturas. Los celtas lo veneraban, lo consideraban mágico, y lo temían. La palabra latina Taxus posiblemente deriva de las griegas toxon (arco) o toxicon (veneno), y esto es así porque todo el árbol, excepto el arilo de las bayas, es venenoso, al contener un potente alcaloide, la taxina, que ataca el sistema nervioso y el corazón, produciendo colapsos con temblores, diarreas o gastroenteritis. Con este veneno (un brebaje de semillas generalmente), se emponzoñaban las flechas que se usaban contra las legiones romanas del emperador Augusto, e incluso algunos se suicidaron mascando sus hojas antes de rendirse tras perder en alguna batalla; Cativolco, rey de los Eburones, se suicido con zumo de tejo, para no caer en manos de Julio César (guerra de las Galias). Incluso Dioscórides dice de el que "ofende gravemente a los que a su sombra se duermen o asientan, y aun muchas veces los mata". Esta era la relación que guardaba el tejo con la muerte, era un árbol funerario, dedicado a la diosa Hécate; se dice de los tejos de los cementerios que a cada boca de un cadáver llega una raíz de tejo para alimentarse de él, y que espantan al demonio; existe además la creencia de que talar un tejo trae mala suerte, ya que su corteza, de color rojo, recuerda la sangre.

Fotografías de Tejo de Salas

Dispones de 9 fotografías de Tejo de Salas

Top