Fana de Genestaza

Fana de Genestaza

La Fana de Genestaza (Xinistaza) es un fenómeno geológico singular. El proceso comenzó en el siglo XIX con un primer desgaje de la ladera occidental de la Sierra de La Cabra, que continúa desmoronándose lentamente. El resultado final es un reguero que arrastra a su paso las cuarcitas blancas de la Formación Barrios.

En muchas zonas montañosas de la Cordillera Cantábrica los sistemas torrenciales representan un elemento destacado en el modelado de las vertientes. Algunos de estos aparatos torrenciales muestran evidencias de actividad actual, siendo conocidos en la toponimia local con la denominación de Fana.

La fana de Genestaza se desarrolla en la vertiente oriental del río Genestaza, en el sector centro occidental de Asturias, cerca del pueblo del mismo nombre. El sustrato geológico del valle está formado por areniscas de La Herrería, calizas y dolomías de Láncara, areniscas y pizarras de Oville y cuarcita de Barrios. Los procesos que han condicionado la evolución del valle son sólo debidos a la acción fluvial sino también a una intensa dinámica torrencial y de laderas. En ella se diferencian los depósitos pertenecientes a pequeños movimientos en masa y derrubios resultantes de la actuación combinada de la gelifracción y reptación superficial, posiblemente acompañados de gelifluxión que se desarrollarían en otros tiempos más fríos.

La cuenca de recepción está formada por varios canales que confluyen en un único cauce que funciona como desagüe, que tiene una longitud de casi 1 km, una anchura de 2 a 3 m y una pendiente media de 25º. En la base la pendiente es menor.

Esta fana es un claro ejemplo de un torrente de montaña con un funcionamiento intermitente que implica la actuación de procesos de transporte en masa. El funcionamiento del sistema torrencial se relaciona con la actuación de un conjunto de procesos erosivos en la cuenca de recepción responsables de la acumulación de material detrítico no consolidado y de otros de transporte de dicho material hacia las zonas más bajas. Entre los primeros está la caída de fragmentos rocosos y la génesis de pequeños movimientos en masa. Los segundos corresponden a la actuación de procesos de transporte de agua y, esporádicamente, de transporte en masa por debris-flow. La actuación episódica de este mecanismo está condicionado por el régimen e intensidad de precipitación y también por el volumen de material acumulado en la cuenca de recepción, existiendo evidencias de que los procesos de transporte en masa pueden ser relativamente frecuentes.

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Fotografías de Fana de Genestaza

Dispones de 10 fotografías de Fana de Genestaza

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