Colegio de Calatrava de Salamanca

Colegio de Calatrava de Salamanca Es el único colegio conservado perteneciente a orden militar. Su historia comienza el 3 de junio de 1522, cuando se acordó erigir un colegio en la Universidad salmantina. El emplazamiento primitivo fue de prestado, pues los primeros colegiales vivieron en casas de alquiler. Desechados varios solares, al final se adquirió el aconsejado por el arquitecto fray Francisco de la Trinidad, en las proximidades del ábside de la Iglesia de San Esteban de Salamanca. El proyecto original se debió al maestro mayor catedralicio Pantaleón de Pontón Setién, seguido en parte por Joaquín de Churriguera, arquitecto del colegio. La compra de los distintos solares se efectuó entre 1715 y 1719,año éste en que habían comenzado las obras, que se iniciaron el 11 de junio de 1717 bajo la maestría del arquitecto dicho, el cual las dirigió hasta su muerte en 1724, momento en que las fachadas de mediodía y poniente llegaban al primer piso. En 1728 informa sobre lo construido Alberto de Churriguera y un año después Pedro de Ribera, quien recomendó como arquitecto a Pedro de Gamboa, que apenas intervino, pues moría en 1730; se hizo cargo entonces de la maestría el aparejador Domingo Díez. Los primeros colegiales, aún sin finalizar el edificio, lo habitarían en 1736; a partir de ahora las obras irán a ritmo lento, reanudadas con fuerza con la llegada de Jerónimo García de Quiñones, autor de la monumental escalera con balaustres estrangulados, que copia la que su padre hiciera para el colegio jesuítico. El rectorado del ilustrado Francisco Ibáñez de Corbera impuso un cambio academicista en las obras: asperonó adornos y cortó de raíz los no realizados, comportamiento defendido asimismo por Antonio Ponz. La carencia de ornatos caracterizó lógicamente el sencillo e insulso patio y la capilla, desornamentada por completo, terminados ambos en 1787. Es lástima que ésta, con sus retablos pétreos, no haya conservado los cuadros pintados por Goya.

Con los avatares históricos descritos, siguiendo el profundo estudio de Ceballos, es comprensible que el edificio bascule entre el barroco y el incipiente neoclasicismo, a la vez que en cuanto a organización general y planimetría es inscribible en la larga tradición de los alcázares españoles: patio y torres en la fachada principal y al medio de las crujías laterales. Esas torres potencian atinadamente la monumental fachada, organizada en dos pisos rematados por una buena balaustrada cuya parte central se quiebra para acoger, en un ático, a modo de peineta, el escudo real; en esa misma calle se abrió un hornacina con la estatua de San Raimundo de Fitero, fundador de la Orden de Calatrava; bajo él, las armas de la misma, que aparecen asimismo en banderas sostenidas por angelotes a los lados de las columnas que flanquean la puerta adintelada, enmarcada por un amplio y quebrado bocelón, elemento también utilizado en las portadas de los torreones, si bien éstas se organizan con pilastras cajeadas. En definitiva, se trata de uno de los edificios más significados de la Salamanca barroca de ese momento.

Recientemente restaurado, ha sido destinado a Casa de la Iglesia de la diócesis de Salamanca, que acoge las oficinas de la curia, residencia de sacerdotes, salón de actos, etc.
Fuente y bibliografía:
Junta de Castilla y León. Portal de Patrimonio Cultural de Castilla y León. José Ramón Nieto González

Fotografías de Colegio de Calatrava de Salamanca

Dispones de 6 fotografías de Colegio de Calatrava de Salamanca

Glosario de términos

Balaustrada
Cada una de las columnas pequeñas que con los barandales forman las barandillas o antepechos de balcones, azoteas, corredores y escaleras. Guarda cuerpo que se coloca a lo largo de una galería, balcón, tribuna, terraza, escalera, etc., por razones de seguridad y estéticas. Está formada por la sucesión de pequeños pilares unidos por un pasamanos.
Barroco
Estilo artístico basado principalmente en el exceso de énfasis y abundancia de decoración, en contraposición al clasicismo renacentista. Se situa entre 1600 y 1750 y su nombre proviene de la palabra barrueco que significa perla irregular, ya que este estilo marcaba exageradamente las formas irregulares y onduladas
Bocel
Moldura de cuarto de cilindro o redondeada
Calle
Franja vertical del ábside formado entre columnas o contrafuertes
Capilla
Edificio contiguo a una iglesia o parte integrante de ella, con altar y advocación particular.
Curia
En la antigua Roma edificio donde se reunía el senado o gobierno de una ciudad
Escalera
Construcción diseñada para comunicar varios espacios situados a diferentes alturas. Partes de una escalera
Hornacina
Hueco coronado por un cuarto de esfera, generalmente practicado en un muro y destinado a recibir una estatua, jarrón, tumba u otro objeto decorativo.
Neoclasicismo
Estilo artístico inspirado en las formas del arte clásico. Se desarrolló entre finales del siglo XVIII y principios del XIX, es una reacción al recargamiento ornamental del barroco
Pilastra
Pilar de planta rectangular adosado a un muro.
Portada
Puerta ornamentada o decorada.
Potencia
Nos referimos a las potencias de Cristo. Son los tres rayos de luz que sobresalen de la cabeza de Cristo. Originalmente adoptaban forma de cruz y se sitiaban en el nimbo de la corona para representar al personaje como a Cristo. Posteriormente el nimbo crucífero evolucionó hasta convertirse en tres rayos que sobresalen de la cabeza y que simbolizan la luz. Potencia puede ser sinónimo de facultad o poder. Según la tradición clásica cada rayo significa una facultad memoria, entendimiento y voluntad que son atributos que identifican a Cristo, cada uno de ellos con una significación distinta.
Retablo
Obra formada por un conjunto de tablas de escultura o pintura religiosa para ser colocada detrás de un altar. Se divide verticalmente en calles, la central más ancha se llama espiga, y horizontalmente en pisos, el inferior se llama predela. El retablo está protegido por el guardapolvo o polsera. La palabra procede del latin retaulus y este a su vez de retro (detras) y tabula (tabla).
Top