Spirula spirula (1 de 2)

Descripción

Las conchas de este cefalópodo raras veces llegan a nuestra costa y lo hacen desde muy lejos; hasta el momento sólo había encontrado un par de ellas y aisladamente, pero esta vez apareció una remesa. Fue curioso pues, en una playa de varios kms de largo, sólo las vi en un tramo de unos cien metros. Pienso que llegaron en una balsa de algas y otros resíduos, donde se acumularon, sino estarían esparcidas por toda la playa y no casi juntas. En la foto están todas las que encontré, incluyendo las mas rotas, y un pececillo seco de adorno. En la 1ª imagen se puede ver el tabique, convexo, y el sifón que conecta las cámaras, de varias de ellas, detalles que todavía no había mostrado. Esto es de no creer; la semana anterior encontré una de éstas y dos semillas exóticas y en consecuencia, después, esperaba encontrar más semillas, no todo esto y nada de lo otro.

Etiquetas

#submarina #naturaleza #fotografía

Datos de la fotografía

Autor: Iñaki Rojo Legarra

Fecha de realización: 24/01/2016

Fecha de publicación: 01/02/2016

Visitas: 2089

Comentarios: 4

Localización

Cantabria, Noja, Playa de Trengandín, Helgueras. (43.47025,-3.48991)

Registro

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Comentarios

¡Iñaki! Eres un artistazo: no conozco a nadie en el mundo capaz de encontrar cantidades ingentes de bichos tan esporádicos y raros de encontrar. ¡Un fuerte abrazo!

Gracias Fernando. Es lógico que encuentre cosas, al perro hay que pasearle todos los días varias veces, así que si no es a la playa es al monte o a los parques. Hay más cosas raras de lo que pensamos, y a menudo no es que sean raras, sino que no nos fijamos en ellas, porque no son atractivas, o son asquerosas, o son pequeñas, etc

Iñaki Rojo Legarra

Iñaki Rojo Legarra

04-02-2016

Coincido con Fernando: ¡eres un crack de los hallazgos!. Y sí, es cierto que hay que tener la vista educada para fijarse en lo que los demás no lo hacen. Eso aparte de lo del perro. Para mi desgracia, lo que más suelo encontrar al pasear por las playas, y a veces un segundo más tarde de lo que debiera, son, precisamente, recuerdos de perros con amos poco cívicos, ya me entendéis... ¡Un abrazo!

Tienes razón, Marcos, con lo de los perros. Por culpa de algunos, otros, tenemos prohibida la entrada en muchos sitios con nuestro perro, independientemente de que, una marea negra, bolsas de basura, aceites de coches, mercurio, plomo, pinturas, colillas, desagües de alcantarillas, parafinas, compresas, tampones, redes, anzuelos, boyas y un largo etcétera de residuos nada biodegradables, imperecederos, acumulativos, venenosos, cancerígenos y otro largo etcétera de calificativos, hayan sido vertidos al mar sin que nadie pague ni haya pagado por ello. A pesar de que lo de mi perro es biodesagradable yo lo recojo, aunque, después de lo que he mencionado, no debería hacerlo, pues el perro no es el único animal que hace esas cosas. He visto destruir mucho, tanto aquí, como en otras partes, y puedo decir que los perros no tienen absolutamente la culpa de naaaaaaada. Jolín que relajau me quedau; perdona, Marcos, pero me has tocado una fibra sensible, JA,JA,JA. Un abrazo a ambos y recuerdos de parte de mi perro.

Iñaki Rojo Legarra

Iñaki Rojo Legarra

05-02-2016
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