Cerebratulus marginatus (1 de 3)
Descripción
Tres fotos de esta especie de nemertino que aún no tiene ficha en la web
Se trata de un gusano con el cuerpo bastante comprimido dorsiventralmente, y que ejemplifica muy bien porqué a los nemertinos se les conoce como gusanos acintados.
La longitud de este ejemplar, cuando se estiraba por completo, rondaría los 25 centímetros, por un ancho de 1,5 centímetros. Relajado (más contraído), podía medir la mitad de largo e incrementar su ancho hasta los dos centímetros, aproximadamente. Esta gran capacidad de contracción y expansión corporal es típica de todos los nemertinos.
En cuanto a sus rasgos diferenciales más notables, destaca por ese dorso y vientre de color arena, con los dos laterales de un color más claro, blanquecino (de ahí el nombre específico, que hace referencia a los márgenes corporales). Su cabeza es indistinta respecto del resto del cuerpo y acaba de forma aguda. Carece de ojos, pero presenta, en cambio, notables fisuras laterales y una boca alargada y muy visible en la cara ventral, de bordes crenulados, que acostumbra a abrir bastante (foto 3). Por su parte, en el extremo posterior del cuerpo se adivina la existencia de una diminuta cola.
Estos animales, grandes cazadores de vida libre, viven, preferentemente, enterrados en la arena fina y limpia (foto1), desde pocos metros de profundidad, aunque también pueden hallarse bajo piedras.
Si se les molesta, especialmente si se les toca en la zona de la cabeza, reaccionan enrollándose sobre sí mismos como un muelle, en una fracción de segundo. También pueden nadar libremente, cosa que hacen poniéndose de lado y moviéndose con gran agilidad mediante rápidas ondulaciones serpenteantes de todo su cuerpo.
Para cazar y alimentarse o para defenderse también pueden protusionar hacia adelante la larguísima probóscide
Otra característica de esta especie es la extrema facilidad con la que se rompe. Muchas veces se trata de un acto voluntario (lo que se conoce como autotomía), a la manera en la que lo hacen tantos otros animales, como las lagartijas. Es un recurso para ponerse a salvo mientras dejan una parte no vital de su cuerpo al depredador, para mantenerlo entretenido mientras huyen.
Encontré ayer a este gusano, a unos 3 metros de profundidad, mientras buceaba en el tramo de costa que va de la Playa de Barra a Punta Subrido, en la zona externa de la Ría de Vigo.
Un saludo.
Fecha de publicación: 12/05/2014
Autor: Marcos Fernández Iglesias

Comentarios
Registro
Accede a tu cuenta con tu email y contraseña.
Una matización con respecto a lo anterior: cuando decía que este animal carece de ojos me refería a ojos visibles y reconocibles fácilmente como tales, porque, en realidad, no le faltan ciertos "ojos pigmentarios", pero son tan insignificantes que lo normal es que se pasen por alto.
Un saludo.
Marcos Fernández Iglesias †
12-05-2014