Los basidiomycetes del género Agaricus ("champiñones") forman setas con láminas libres (no llegan hasta el pie), inicialmente de color gris pálido o rosa vivo, pero que después se vuelven pardo achocolatadas por la maduración de sus esporas. Su esporada es, pues, de color pardo chocolate o pardo-púrpura.
Entre las muchas especies de este difícil género, conviene conocer ésta ya que es la única potencialmente tóxica.
Posee dos caracteres muy evidentes y fáciles de reconocer: 1)amarillea intensamente, sobre todo tras rozar con los dedos el margen del sombrero, el anillo o la base del pie y 2) Huele a tinta o fenol (hospital). Ambos caracteres se intensifican con la cocción de los ejemplares, al punto que el amarilleamiento se vuelve de color cromo y el olor se hace casi insoportable.
Existen muchas variedades de esta especie, unas con pequeñas escamitas sedosas grisáceas, otras con el sombrero totalmente blanco.
Agaricus xanthodermus puede vivir en prados abiertos o en el interior de los bosques.
Algunas personas lo consumen (¿cómo será posible?) sin problemas, pero en otras ocasiones origina problemas gastrointestianles más o menos severos.
Existen especies comestibles que TAMBIEN AMARILLEAN, pero éstas TIENEN OLOR ANISADO O DE ALMENDRAS AMARGAS, nunca de fenol o tinta.
Si en alguna ocasión vemos en un prado UNA GRAN CANTIDAD de champiñones, creciendo apelotonados y con los SOMBREROS TRUNCADOS (NO CONVEXOS), hay que pensar en la gran posibilidad de que se trate de nuestro xanthodermus. Los champiñones "buenos" no suelen apelotonarse y su sombrero es siempre convexo.