Todarodes pacificus (1 de 2)

Descripción

Hola a tod@s,

Como muchos ya sabéis, hace poco estuve en Japón. La razón de mi viaje fue la asistencia a un congreso especializado en cefalópodos, CIAC2015, que se desarrollo en Hakodate. Hakodate es conocida como la ciudad del calamar, y no es en vano: la ciudad está llena de iconografía relacionada con cefalópodos y en casi todos lados puedes encontrar sitios donde comprar algún producto derivado del calamar. La mayor parte del calamar que comercializan es esta especie, Todarodes pacificus. Precisamente, es Hakodate la localidad típica de la descripción original.

En muchos restaurantes de la ciudad te encontrabas con piscinas llenas de calamares vivos: en algunas de las cuáles podías "pescar" el propio calamar que ibas a comerte y te preparaban al instante sashimi de calamar o, para los menos empáticos, el calamar bailarín.

Pronto os subiré más material de esta emblemática especie, pero centrándome más en la morfología del bicho.

Un saludo.

Etiquetas

#otros-mares #naturaleza #fotografía

Datos de la fotografía

Autor: Fernando Ángel Fernández Álvarez

Fecha de realización: 08/11/2015

Fecha de publicación: 08/01/2016

Visitas: 2289

Comentarios: 4

Localización

Hakodate, Hokkaido, Japón (0,0)

Registro

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Comentarios

Fernando, ese enlace que has puesto es de lo más gore... ¡probe bicho!

¡Pues sí! Pobre bicho... En un congreso pusieron dicho vídeo en una presentación sobre las implicaciones éticas del uso de cefalópodos en la dieta humana.

Tiene su coña lo de las implicaciones éticas de nuestros amigos japoneses... Supongo que todos los demás bichos que nos comemos y que otros matan por nosotros no consideran que generen las mismas implicaciones éticas (no hay como no ver para no sentirse responsable). Y esto es particularmente curioso viniendo de un pueblo que mata sistemáticamente y con métodos especialmente crueles (o mataba, no sé si ya pararon de hacerlo) a miles de cetáceos, en contra de la opinión del resto del mundo.

Al final, de lo que se trata es de evitar las muertes inútiles de cualquier ser vivo y de minorar en lo posible su sufrimiento cuando haya que matarlo. Pero implicaciones éticas, sobre todo para el pobre calamar, digo yo.

Muchas gracias por las fotos y los vídeos, Fernando. ¡Un muy fuerte abrazo!.

¡Tú lo has dicho! Lo importante es pensar en ello, hacer autocrítica y que eso derive en el mejor trato al resto de los animales que matemos, sea para nuestra alimentación o para cualquier otro propósito legítimo. ¡Fuerte abrazo!

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