Eurynome spinosa (2 de 3)

Descripción

Con idea de retomar la labor de intentar documentar un poco más nuestra fauna marina, que la tenía un poco aparcada últimamente, subo hoy tres fotos de esta curiosa especie de cangrejito, que carece de momento de ficha en la web. Lo hallé este pasado verano oculto bajo una piedra que volteé, a unos 2 metros y medio de profundidad aproximadamente, en la prolífica Playa de Temperán. De muy pequeño tamaño (sobre 1,3 centímetros) y aspecto compacto y oblongo, sus extremidades son cortas y su cuerpo está muy lleno de notorias protuberancias irregulares, como se aprecia en la foto 3 (un detalle del dorso del caparazón). Pertenece a la familia Majidae, la misma que la de nuestros centollos, con los que, a pesar del diminuto tamaño de esta especie, comparte un gran parecido apreciable a simple vista, al que no son para nada ajenas esas protuberancias y espinas del caparazón. Las pequeñas quelas, también muy tuberosas, poseen varias franjas rojizas transversales y verticales sobre su fondo claro, que se aprecian en la foto 2. Con esas quelas estos cangrejos suelen arrancar pedacitos de algas, esponjas u otras partículas y, tras pasarlas por la boca para impregnarlas de adhesivo, colocárselas en la espalda para lograr un buen camuflaje que los haga pasar inadvertidos a sus predadores. El resto del cuerpo es de color básicamente pardo/ocre. A diferencia de la especie próxima -Eurynome adspersa-, en ésta las espinas rostrales son muy agudas y se separan mucho distalmente la una de la otra, ya desde la base, que, además, carece de las notables expansiones a ambos lados que luce, en cambio, E. adspersa. Las fotos a este cangrejo se las hice mientras caminaba sobre una colonia de Distomus variolosus, y tras haberlo limpiado un poco de la gran cantidad de partículas que cubrían su dorso. Un saludo.

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