Iglesia de Nuestra Señora de la Antigua

Iglesia de Nuestra Señora de la Antigua La iglesia de Santa María la Antigua se levanta al norte de la Catedral de Valladolid y de las ruinas de la Colegiata de Santa María la Mayor. Este edificio, y especialmente su torre románica, es uno de los principales emblemas de la ciudad.

La primera noticia que se tiene de esta iglesia es del año 1177, en un reparto de bienes entre el abad de la Colegiata y los miembros del Cabildo. Se cree que la construcción de la iglesia es anterior a la llegada del Conde Ansúrez al a ciudad, y tras la consagración de la misma el conde la pudo emplear como capilla palatina.

Antes de este edificio existió otro, del cual no se guarda dato alguno, del siglo XI o incluso anterior, quizás de origen visigótico o mozárabe. En esta época se construyó un pórtico en el lado norte y una torre, que está fechada en 1180 por García Guinea. Debido a la proximidad del cauce del río que pasaba frente al templo, este fue rehecho en el siglo XIV con tres naves y triple cabecera, con elementos constructivos góticos pero todavia manteniendo una estética románica.

El edificio sufrió múltiples reformas, debido a su carácter de parroquia populosa y por su deficiente cimentación, construido al lado de uno de los ramales del río Esgueva. Hacia 1500, se adosó a su flanco sur una casa rectoral y el ábside lateral del lado del Evangelio fue transformado. En él se alojaba la imagen de Nuestra Señora de la Zarza que, según la leyenda, había sido encontrada durante la construcción de la primitiva iglesia en 1096, oculta en una zarza. Adosada a esta capilla, se disponía la casa de las mujeres emparedadas. En estos momentos, también se realizó un coro alto soportado por una bóveda de crucería estrellada, sobre el tramo de los pies de la nave central. A mediados del siglo XVI, el célebre arquitecto Rodrigo Gil de Hontañón, debido a la ruina del edificio, replanteó el sistema de contrarrestos del edificio, construyendo nuevos arbotantes y contrafuertes y reformando y abriendo varias ventanas. También en ese momento, los huecos del último cuerpo de la torre románica fueron reformados para poder colocar campanas mayores en ellos, se dispusieron antepechos en todos sus huecos y el cuerpo bajo de la misma se forró con un grueso muro de piedra de más de dos metros de espesor para aumentar su estabilidad. Así mismo, en el siglo XVI se realizó un estimable retablo mayor, tallado por Juan de Juni entre 1550 y 1562, que enmascaró el interior del ábside de la nave central. Hacia 1706 se añadió la capilla de Nuestra Señora de la Soledad y las Ánimas, junto a la sacristía de la Parroquia, ambas piezas adosadas a los ábsides y realizadas en ladrillo. Varios retablos de estilo barroco fueron asentados en el interior durante los siglos XVII y XVIII, contribuyendo a enmascarar más el espacio gótico, escasamente valorado durante el barroco. En algún momento, los dos grandes rosetones de los cruceros fueron cegados.

Se conoce el interior del edificio antes de las restauraciones del siglo XX gracias a una serie de fotografías publicadas por Martí y Monsó en su obra Estudios de arte relativos principalmente a Valladolid, de 1898. El interior estaba totalmente enlucido. En el ábside mayor se encontraba el retablo de Juan de Juni y el zócalo se encontraba decorado con interesantes azulejos. El ábside del lado de la Epístola estaba dedicado a capilla del Doctor Tovar y contenía un retablo con buenas pinturas tardogóticas del siglo XV (hoy conservado en el Museo Diocesano y Catedralicio de Valladolid) y se cerraba con una apreciable reja del siglo XVI. En el muro sur del crucero se disponía un retablo barroco y se abría un arco angrelado que daba paso a la pequeña capilla de San Sebastián. En los dos pilares torales más cercanos a la cabecera, se encontraban adosados sendos retablos barrocos de hacia 1700, haciendo el oficio de colaterales. En el coro alto, obra de hacia 1500, se hallaba un órgano de fachada barroca. Tenemos noticias de órganos en esta iglesia desde 1512, aunque hoy no conserva ninguno.

A finales del siglo XIX, el edificio acusaba ruina inminente. En 1897, el edificio fue reconocido como monumento nacional, realizando el arquitecto Enrique María Repullés un informe en el que se valoraba la iglesia. Tras obtener los fondos necesarios, la restauración comenzó en 1900, bajo la dirección de Antonio Bermejo, quien intervino en la torre románica y en la galería porticada. Al fallecer éste en 1901, se nombró director de la obras a Vicente Lampérez, quien restauró la flecha de la torre y la galería porticada. Sin embargo, Lampérez renunció en 1904 por la escasez de fondos debido a la gran cantidad de obras nacesarias para salvar el edificio, en muy mal estado, al que Lampérez no asignaba el interés suficiente como para realizar en él obras de gran envergadura. En 1908, Juan Agapito y Revilla y Santiago Guadilla de la Serna realizaron un informe en el que declararon absolutamente ruinoso todo el edificio gótico menos los ábsides, con lo que la iglesia se cierra al culto, trasladándose el culto parroquial a la cercana iglesia de las Angustias. Al año siguiente, el arquitecto Ricardo García Guereta realizó un proyecto para restaurar la torre eliminando sus antepechos del siglo XVI y el gran muro que forraba su cuerpo bajo, procediendo a recalzar la torre con hormigón, además de sustituir algunos sillares y piezas de impostas, rejuntando toda la sillería de la torre. En 1911, dado el mal estado de las partes góticas, Adolfo Fernández Casanova declaró que sería mejor derribar las naves y el crucero de la iglesia, además de todas las edificaciones adosadas, salvando los ábsides, la torre y la galería porticada románica, y realizar a continuación un edificio nuevo que no desdijera de lo conservado. Se hizo caso de ello y hacia 1917 se procedió a derribar las partes indicadas. El retablo de Juan de Juni se trasladó en 1922 a la Catedral de Valladolid, donde se encuentra en la actualidad. El templo que se reconstruyó entonces es de estilo neogótico y está totalmente basado en la morfología de la antigua iglesia ojival, armonizando perfectamente con los ábsides del siglo XIV conservados. Se organiza de la misma manera que la iglesia coetánea a los ábsides: tres naves de dos tramos con crucero no marcado en planta y cubierta con bóvedas de crucería sencilla. El nuevo templo también dispone de coro alto, inspirándose y reaprovechando elementos del datado en el siglo XVI, y de arbotantes. En los dos hastiales de los cruceros se introducen sendos rosetones, más pequeños que los originales, sobre los que se disponen unas galerías de arcos ciegos que no existieron antes. Los ábsides también fueron restaurados, sustituyendo numerosos sillares y molduras, cerrando las ventanas que habían sido abiertas a posteriori y abriendo las originales que había tapado el retablo de Juan de Juni. Las obras se terminaron en la década de 1930, aunque en 1947 se realizó una sacristía neogótica adosada al crucero sur para el servicio de la iglesia y, al año siguiente, se restauró la galería porticada románica, reforzando su cimentación y saneando su cubierta.

En 1952, la iglesia se abrió de nuevo al culto.

El resto románico más sobresaliente es sin duda la torre, de una perfecta estampa y buenas proporciones que debió ser construida a comienzos del siglo XIII, siguiendo el modelo de la torre hoy desmochada de la antigua colegiata románica que se levantó en los primeros años del siglo XII. Este modelo se continuó en otros lugares, como en la Iglesia de El Salvador de Simancas o la Iglesia de Santa Eulalia de Paredes de Nava. Tiene planta cuadrangular y su eje aparece ligeramente desviado hacia el norte. Se divide en cuatro cuerpos, separados por impostas ajedrezadas de tres filas de tacos.

El cuerpo inferior, el doble de largo que los otros, está dividido en dos pisos; el bajo cubierto con bóveda de cañón apuntado y con un vano en aspillera a cada lado. Hacia la iglesia aparece un pequeño vestíbulo más bajo, también cubierto con bóveda de cañón y que apoya en el suelo. A continuación aparece la portada, de arco apuntado doble, con impostas de nacela y jambas no decoradas. El segundo piso del primer cuerpo aparece cubierto con bóveda de cañón; en el muro occidental aparece una ventana con arco de medio puntoy luz pequeña, formada al exterior por doble arco abocinado con capiteles decorados con motivos vegetales; en este piso se encuentra la entrada desde el coro que sube por escalera de caracol; la entrada es una portada de arco de medio punto con capiteles decorados con hojas y piñas.

El segundo cuerpo tiene una ventana geminada en cada uno de sus frentes con arcos de medio punto por encima de los cuales va una chambrana lisa con intradós ajedrezado. todos los capiteles aparecen decorados con motivos vegetales.

El tercer cuerpo también aparece separado de los otros por una línea de imposta taqueada, con el mismo sistema decorativo que en el segundo cuerpo pero son tres y no dos las ventanas de cada frente; los parteluces muestran columnas pareadas con el cimacio ajedrezado, con una columna más a cada lado, cuyos capiteles tienen decoración vegetal.

El último cuerpo tiene ventanas geminadas y el parteluz lleva adosadas columnas pareadas. La torre se remata en un chapitel piramidal muy apuntado.

El pórtico septentrional, construido en las mismas fechas que la torre, fue restaurado en exceso durante principios del siglo XX. A pesar de ello sufre un progresivo deterioro. Está formado por tres tramos separados por cuatro contrafuertes, con cinco arcos en cada tramo, pero sólo cuatro en el de poniente. Son arcos de medio punto soportados por conjuntos de tres columnas que comparten cimacio, fustes unidos y basas áticas; los capiteles son lisos y prismáticos, excepto los occidentales, que muestran cierta decoración vegetal muy erosionada hoy día. La cornisa del pórtico está soportada por canecillos lisos. La portada se abre en el hastial de poniente, pero está muy restaurada, y sobre ella aparece un pequeño rosetón.

Aparte de los elementos románicos, hoy en día la iglesia presenta tres naves de dos tramos, crucero manifestado sólo en alzado y cabecera con tres ábsides poligonales.

Los ábsides muestran ventanas geminadas ojivales separadas verticalmente por potentes contrafuertes coronados por pináculos. Las ventanas muestran derrame interior y exterior con columnillas, teniendo un nivel de ventanas los ábsides laterales y dos el central. Los ábsides se rematan por fuera con una balaustrada calada y con gárgolas, de las cuales varias son originales y muestran influencias burgalesas. En el interior, los ábsides se cubren con bóvedas nervadas, cuyos nervios se apean sobre columnillas con capiteles de tema vegetal o con figuras de animales o personas; los plementos del ábside principal (el central) están calados con rosas. El crucero, restaurado en el siglo XX, muestra en sus hastiales dos rosetones con derrame sólo exterior con tracería a base de círculos quizá inspirada en el rosetón occidental de la Catedral de Burgos Se cubre con bóvedas de crucería sencilla apeada sobre pilares de núcleo cilíndrico con culumnillas adosadas o bien sobre sobrias ménsulas. Al exterior, todo se remata con una balaustrada calada. El crucero sur tiene adosada en su hastial la sacristía neogótica realizada en 1947, cuyo interior es completamente utilitario. Las naves laterales y la central, más alta que éstas, muestran una cubrición similar a base de bóvedas de crucería sencilla apeada sobre pilares de núcleo cilíndrico con culumnillas del tipo mencionado, separándose las tres naves mediante arcos ojivales moldurandos que descansan sobre los dichos pilares. La ilumninación se resuelve con sencillos huecos pareados a la nave central y con ventanas ojivales geminadas con derrame sólo exterior en las naves laterales. Al exterior, los esfuerzos de la bóveda de la nave central se resuelven con cuatro arbotantes y los de las bóvedas de las naves laterales, con contrafuertes coronados con pináculos.
Fuente y bibliografía:
Wikipedia

Fotografías de Iglesia de Nuestra Señora de la Antigua

Dispones de 23 fotografías de Iglesia de Nuestra Señora de la Antigua

Glosario de términos

Ajedrezado
Decoración de cuadrados alternativamente en sobrerrelieve y bajorrelieve.
Arbotante
Arco exterior que describe un cuarto de circunferencia y cuya misión es la de contrarrestar los empujes de las bóvedas de las naves de un edificio.
Arco
Elemento sustentante, que descarga los empujes, desviándolos lateralmente, y que está destinado a franquear un espacio por medio de un trayecto generalmente curvo.
Aspillera
Abertura en el muro larga y estrecha. Vano con fuerte derrame al interior que poseen los muros para permitir la defensa protegiendo al defensor.
Balaustrada
Cada una de las columnas pequeñas que con los barandales forman las barandillas o antepechos de balcones, azoteas, corredores y escaleras. Guarda cuerpo que se coloca a lo largo de una galería, balcón, tribuna, terraza, escalera, etc., por razones de seguridad y estéticas. Está formada por la sucesión de pequeños pilares unidos por un pasamanos.
Barroco
Estilo artístico basado principalmente en el exceso de énfasis y abundancia de decoración, en contraposición al clasicismo renacentista. Se situa entre 1600 y 1750 y su nombre proviene de la palabra barrueco que significa perla irregular, ya que este estilo marcaba exageradamente las formas irregulares y onduladas
Basa
Pieza inferior de la columna que sirve de apoyo al resto
Cabecera
Testero de la iglesia o parte en que se halla el altar principal.
Cabildo
Órgano ejecutivo eclesiástico encargado del cuidado y gobierno de las iglesias mayores de la misma en sus aspectos litúrgicos y organizativos
Canecillo
Adorno saliente que sirve para sostener alguna pequeña cornisa, busto, balcón etc. Suelen estar decorados con figuras diversas o motivos geométricos.
Capilla
Edificio contiguo a una iglesia o parte integrante de ella, con altar y advocación particular.
Capitel
Parte superior de una columna, compuesta de molduras y otros elementos decorativos. Elemento colocado sobre el fuste de una columna que sostiene directamente el arquitrabe, arco etc. Los capiteles pueden ser vegetales, historiados (con historias), figurados (con personajes), antropomorfos (se reconocen figuras humanas), zoomórficos (animales conocidos) y fantásticos (animales no existentes). La voz proviene del latín capitellum diminutivo de caput (cabeza)
Chambrana
Moldura que se pone alrededor de las puertas, ventanas etc.
Chapitel
Remate apuntado de una torre generalmente bulboso, cónico o piramidal.
Cimacio
Pieza en forma de tabla delgada que remata los capiteles, normalmente jonicos y corintios.
Contrafuerte
Construcción destinada a contrarrestar el excesivo empuje sufrido por una pared.También llamada estribo.
Cornisa
1. Coronamiento compuesto de molduras, o cuerpo voladizo con molduras, que sirve de remate a otro. 2. Parte superior del cornisamento de un pedestal, edificio o habitación.
Coro
Parte de la iglesia donde se situan los monjes o sacerdotes para cantar el oficio divino. A lo largo de la historia de la arquitectura su ubicación dentro del templo ha sufrido diversas variaciones, si se sitúa en la nave central se aísla mediante un cerramiento
Crucero
Espacio en que se cruzan la nave central de una iglesia y la que la atraviesa.
Cubierta
En general, sistema de cierre de la parte superior de una construcción.
Derrame
Disposición oblicua del interior de un vano por la que es distinta la abertura de un lado al otro del muro.
Enlucido
Revoco con que se cubre un muro de materiales pobres
Escalera
Construcción diseñada para comunicar varios espacios situados a diferentes alturas. Partes de una escalera
Fuste
Parte de la columna situada entre la basa y el capitel
Hastial
Triangulo superior de un muro enmarcado por las vertientes del tejado.
Imposta
Hilada de piezas sobresaliente sobre la cual se levanta un arco o bóveda, que se coloca también para evitar que el agua discurra de forma continua por la fachada del edificio. También es un saliente con forma prismática a modo de capitel situado sobre una pilastra.
Jamba
Elemento vertical que no es una columna y que sostiene con su pareja un dintel de una ventana o puerta.
Moldura
Elemento corrido que se coloca sobre una superficie para decorarla y que se clasifica según su perfil, siendo normalmente de poca anchura.
Nacela
Moldura con perfil cóncavo de cuarto de cilindro
Nave
Cada uno de los espacios en que se divide longitudinalmente una iglesia.
Parteluz
Pequeña columna que divide la luz de una ventana o puerta
Pilar
Pilastra exenta, suele tener más consistencia que la columna.
Planta
Plano de la sección horizontal de un edificio.
Portada
Puerta ornamentada o decorada.
Retablo
Obra formada por un conjunto de tablas de escultura o pintura religiosa para ser colocada detrás de un altar. Se divide verticalmente en calles, la central más ancha se llama espiga, y horizontalmente en pisos, el inferior se llama predela. El retablo está protegido por el guardapolvo o polsera. La palabra procede del latin retaulus y este a su vez de retro (detras) y tabula (tabla).
Sillar
Bloque de piedra labrado y asentado en hiladas, con forma, dotado de seis caras.
Vano
Abertura o hueco abierto en un muro que realiza funciones de puerta, ventana, respiradero etc.
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